
Querido amigo del alma:
Esta noche es un suplicio para mi. Mirando tu rostro en las fotografías abandonadas dentro de mi mente, me hace recordar tu huida y el dolor regresa con más potencia. ¿Porque te tuviste que ir?...
Yo te quería mucho, eras mi mejor amigo y dijiste que siempre estaríamos juntos pasara lo que pasara y de repente huiste. ¿Fue por mi forma de ser? Si fue por eso, lo siento pero no puedo evitar ser yo. Si no fue por eso entonces, ¿qué fue?...
Hoy las lágrimas se han deslizado por mis mejillas y tu no estuviste allí para confortarme y decirme que todo estaría bien. Porque ahora te necesito más que nunca, porque hoy perdí lo más valioso para mi y tu simplemente me diste la espalda.
Me acuchillaste de forma tan rápida que no me dio tiempo de detenerte y preguntarte el porque. Simplemente dejaste la sangre correr mientras en tu rostro se deslizaba una lágrima. ¿Acaso llorabas por mi? Lo dudo mucho pero no importa aún así no dejaré de quererte.
No importa lo que me hiciste, mi cariño por ti nunca dejará de existir, los recuerdo que guardaré de ti serán los más felices que hicimos juntos y eso ni el tiempo lo podrá borrar.
Siempre fui egoísta, siempre pensé en mi, jamás pensé como te sentías....y ahora que recuerdo muchas veces te vi mirandome con rencor y con tus ojitos cristalinos por las lágrimas retenidas me veías reír y ser feliz....muy a pesar de que tu sufrías por algo.
Lo siento mucho, no sabes como me gustaría regresar el tiempo y preguntarte el porque de tus lágrimas retenidas...ya no puedo pensar, ya no puedo seguir...lo siento tanto, viviré con la culpa porque es algo que tendré que pagar toda mi vida, pagaré por no haber ayudado a mi mejor amigo.
Tu me decías que era tu mejor amiga y te creí, me dijiste que me levantarías cada vez que cayera al igual que yo haría por ti...bueno...hoy estoy tirada en el suelo con tu carta cerca del corazón, ¿donde están esos brazos que me ivan a socorrer cuando cayera? ¿Dónde esta ese rostro sonriente que me abrazaría y no me dejaría? ¿Dónde estas amigo?
Te prometí cuidarte, te prometí no dejarte llorar, jamás lo cumplí, y cuando te encontré era ya demasiado tarde.
Me ahogo con mi dolor....
Jamás te podré decir adios, porque aún mi cerebro no razona tu huida...
Nos vemos amigo, con mi dolor te despido con la mano mientras mi mente viaja a la última imagen que tengo de ti...allí tirado en el suelo con sangre en las muñecas y brazos, con cortadas en las venas y mi foto contigo a lado...esta será la última vez que piense en eso porque para mi sigues vivo y vivirás por siempre, porque siempre pensé que eras inmortal, ¡que ilusa! Soy una tonta al pensar eso...no...ya no pensaré en tu suicidio, sólo pensaré en tu sonrisa y esperaré que mis sueños se inunden con tu presencia.
Nos vemos mi angel, porque lo siento y te quiero...porque con tu muerte tal vez logre apreciarte más cuando nos volvamos a ver en el cielo.
Con cariño,
tu amiga.
P.D. Lo siento si es confusa mi carta, mi angel guardian, pero mis manos tiemblan...y mi dolor me ciega.
0 comentarios:
Publicar un comentario